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2014/10/27: La directora del Ibader destaca el potencial aprovechamiento de las algas como fertilizante de origen natural.

Las algas marinas constituyen una alternativa interesante como fertilizante de origen natural de reducida carestía”, así lo señalaba la directora del Instituto de Biodiversidad Agraria y Desarrollo Rural (IBADER) y profesora del Departamento de Producción Vegetal da USC, Elvira López Mosquera, en el marco de la sesión de divulgación científica celebrada el pasado viernes en Cee (A Coruña), al amparo de las jornadas ‘La conservación del medio natural, tarea común’, promovidas por la USC. En su exposición, que se desarrolló bajo el título ‘Las algas como fertilizante en agricultura’, la directora del Ibader destacó que estos organismos, “además de constituir un recurso para el hombre con múltiples aplicaciones, son la base de una cadena trófica que depende de ellas”, por lo que ha recomendado hacer un aprovechamiento sostenible de dicho recurso. 

Elvira López, acompañada de Marta Illera Vives, doctoranda del Departamento de Producción Vegetal de la USC, abordaron, así, el uso de las algas como fertilizante y las posibilidades de su empleo para este fin, bien como algas frescas, secas, lavadas, compostadas, etc... Ambas investigadoras coincidieron en señalar que en aquellas zonas donde las algas constituyeron un residuo por episodios de eutrofización, “el compostaje se utiliza como una de las técnicas más apropiadas desde el punto de vista económico y ambiental para reducir su volumen y obtener fertilizantes de origen natural”. A través de este proceso, explicaban, se obtiene un compost de calidad rico en elementos nutritivos, sobre todo potasio y micronutrientes, perfectamente higienizado y libre de compuestos fitológicos y contaminantes como metales pesados, salvo que las algas procedan de zonas contaminadas.  

Tanto Elvira López como Marta Illera subrayaron asimismo que “para alcanzar las condiciones más idóneas para el proceso de compostaje es frecuente que se acuda a procesos de co-compostaje utilizando diferentes materiales con características complementarias”, como son los restos de pescado, otro material fácilmente disponible en la costa gallega.  

“El compost obtenido a partir de algas y restos de pescado constituye un fertilizante de origen natural susceptible de ser empleado en sistemas de cultivo ecológico”, destacaron ambas investigadoras de la USC. “Pensemos que en la agricultura ecológica hoy en día existe carestía de fertilizantes orgánicos de calidad, y los fertilizantes realizados a base de productos marinos de origen natural pueden ser una alternativa interesante para la fertilización de suelos en este tipo de agricultura”. En este sentido, recordaron la creciente importancia de las producciones ecológicas y de los niveles de consumo de este tipo de productos.

Fonte: IPAC.agricultura